Título: El secadero de iguanas
Autor: Pedro Andreu
Año publicación: 2011
Número de páginas: 276
Autoconclusivo
Encuadernación: Tapa blanda con solapas
Género: Ciencia ficción / Narrativa
Un desierto. Una carretera. Un motel. En este lugar abandonado a su suerte tras una inexplicable catástrofe, un puñado de personas tratan de encontrar la felicidad. Unos beben, otros aman. Algunos se vuelven locos. Las voces luchan contra los silencios. La Soledad. La Belleza. El deseo. Cada año, las parsimoniosas iguanas acuden para morir frente al motel, al otro lado de la carretera, en un lugar conocido como El secadero. En sus ojos habita un abismo que asusta y atrae al mismo tiempo.La violencia de la pasión. El olor a la muerte. El tintineo de unas botellas colgadas en un árbol.
Antes de comenzar con esta reseña, quiero dar la bienvenida a la editorial que viene tras esta novela, Portal Editions, una (de momento) pequeña editorial nacida en Vitoria-Gasteiz y cuyos sueños son llevar la literatura a todos y cada uno de los rincones del mundo, allá donde haya un lector que quiera sumergirse entre las páginas de sus obras.
No sólo tienen unos títulos maravillosos y cautivadores, que podéis ver en su catálogo, sino que además
publican en Euskera, Castellano e Inglés y podréis encontrar literatura de
diversos géneros: narrativa, ciencia ficción y fantasía, entre otros.
Esta es la primera novela que ha llegado a mis manos gracias a Portal Editions,
El secadero de iguanas, próximamente os traeré más títulos de sus colecciones y estoy segura de que os van a gustar, me siento muy afortunada de colaborar con ellos porque su grupo está compuesto por personas encantadoras y llenas de sueños.
Pinchando en el logotipo de la editorial podéis visitar su página web.
Opinión personal
El secadero de iguanas nos sitúa en medio de un desierto, a la puerta de un motel perdido en lo más remoto de una carretera que hace conexión entre dos ciudades. El calor es sofocante, el alimento y la clientelas son escasos y, para colmo, sus dueños son una pareja que está entrando en la edad avanzada y no han tenido descendencia. Cada día es prácticamente una copia del anterior, hasta que llegan los gitanos y, con su marcha, el embarazo... y la tormenta. La tormenta más larga y violenta que jamás hayan sufrido los dueños del motel y sus huéspedes. Esa tormenta será el fin y el comienzo de un nuevo mundo, aunque en el motel el tiempo parezca haberse detenido.
¿Qué se os viene a la cabeza cuando pensáis en el fin del mundo o el apocalipsis? Ciudades destrozadas, miles de vehículos abandonados, desolación, gente huyendo despavorida... es lo que pienso yo. Pero ¿no creéis que hay lugares en los que el fin de mundo no se notaría? Lugares en los que parece que el tiempo se ha detenido y cada día es igual al anterior, donde el contacto con la civilización es casi nulo... Este libro nos desvela esa realidad, y si pensáis que será monótona o aburrida estáis equivocados.
La novela, narrada en tercera persona, nos cuenta la historia de la familia que vive en el motel El Secadero; pasando por todos los miembros de la familia y por los pintorescos huéspedes que se alojarán en el motel en busca de un descanso para el sofocante calor; pero deteniéndonos sobre todo en la joven Martina. El libro está dividido en varios cuadernos que narran distintas etapas de la vida de Martina y los que la rodean, remarcando los notables cambios en ese páramo de quietud en el que viven. En un principio no entendí muy bien la distribución de la historia, el por qué de esos cuadernos; más tarde todo tiene sentido y conocemos el por qué. La ambientación me ha transportado de lleno al Secadero. He podido vislumbrar los cañones a lo lejos, los lagartos, el suelo arenoso, duro y amarillento, el sol cegador, el calor y el aire asfixiante, la carretera sin fin, el canto de los grillos y las cigarras ensordeciéndolo todo...
Me he quedado prendada de la pluma de Pedro Andreu, pero no precisamente por su sutileza al escribir. Este señor, novel en narrativa (ha publicado numerosos poemarios y relatos), me ha encandilado con rudeza y pasión. Sus estilo narrativo es sencillo y seductor, como el tacto de las manos ásperas y el olor fuerte del aguardiente; no es impoluto, pero me ha gustado.
Los personajes son, sin lugar a dudas, los que consiguen conquistar al lector. Pedro Andreu ha dotado de una increíble fuerza y realismo a los personajes de la novela, virtudes que han conseguido hacerme disfrutar muchísimo más de la historia.
Martina es un personaje alucinante. Fuerte, seductora, violenta, extraña y carismática, esta mujer nos acompaña de principio a fin en el libro y para mí, ha sido un personaje deslumbrante, con su luz y sus sombras.
Algo muy interesante, en el que me hubiera encantado que el autor se explayase, es en las Djins. Unas criaturas de lo más misteriosas que aparecen en el libro, ensombreciendo las caras de las personas que oyen hablar de ellas.
Finalmente, la historia desencadena con un final de ciencia ficción, mezclándolo con el realismo; me ha sorprendido mucho ir atando cabos al final del libro y encontrarme con algo así. El autor decide cerrarlo todo con un golpe en la trama que, personalmente, me ha dejado temblando. Finales así son una delicia, cuando es el libro quien manda sobre el lector y no al revés.
Concluyendo, mi recomendación es firme. El secadero de iguanas ha sido una lectura sin igual, mi madre ya me lo ha quitado de las manos. Además ha sido galardonado con el Primer Premio del Certamen Internacional de Novela Fantástica. ¡Y está a precio de risa! No llega a 11€ ¿A qué estáis esperando? ;)
Muy bueno
Muchísimas gracias a Portal Editions y a sus magníficos editores por el ejemplar.